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martes, 31 de mayo de 2022

El compromiso que nos interpela

 

Por Tito Benítez, Psicólogo

Un día como hoy, pero del año 2004 fue encontrado el cuerpo de una niña de 11 años al pie del Cerro Yaguarón. Su nombre era Felicita Estigarribia. La víctima fue abusada sexualmente y estrangulada. El autor de aquel horrendo crimen hasta hoy día se encuentra prófugo. Esa es la razón por la cual cada 31 de mayo  recordamos el Día Nacional Contra el Abuso y la Explotación Sexual de Niños y Adolescentes del Paraguay. (Pintos, 2022)

Datos nada alentadores.

Hoy es el día que nos invita a que reflexiones y aunemos esfuerzos para luchar contra este flagelo. Los datos no son nada favorables. Solo en lo que va del año 2022 se tiene aproximadamente 7 denuncias de abuso por día que llegan al Ministerio Público. Hasta el mes de abril  se recibieron 885, tal como indica la publicación de un medio capitalino. (2022)

Si hacemos un cuadro comparativo, en el 2019 se recibieron 3.284 denuncias; en el 2020, 2672 denuncias; 2957 en el año 2021 y en lo que va del año, ingresando el sexto mes, ya van 885. De estas denuncias, las nenas son las víctimas principales.

No soy amante de los números, pero estos datos sirven para que analicemos  hacia dónde estamos apuntando como sociedad. 

Discusiones necesarias

Este día nos llama a la conciencia que tenemos los adultos con respecto a los niños. No sólo por la implicancia penal, sino principalmente por el compromiso como miembros de una sociedad, padre, madre, hermano, hijo, primo, amigo o como profesional. Es la conciencia cívica para hablar por el niño que es víctima en ese momento. Nuestra actuación puede marcar la vida de ese niño o niña. Así que denunciar, más que un requerimiento  legal, es una cuestión de humanidad.

El niño aún no tiene voz en este momento. Los adultos somos los responsables de comunicar a las autoridades pertinentes. Así también, denunciemos y evitemos más abusos mediante los espacios de educación de las emociones, del diálogo antes que la violencia, de la participación que integra en vez del que margina, de las discusiones sanas que buscan el bien común, de la inclusión a personas con perspectivas políticas, religiosas y hasta culturales diferentes. De la creación de espacios de debates abiertos que construyen y donde las personas se sientan valorados por lo que son. Y no minusvalorados porque ven o sean vistos como personas-objeto, susceptibles de la violencia. Debemos crear espacios donde nos sintamos personas y no cosas. (Buber, 2015)

La discusión debe continuar y nuestras acciones nos deben lleven a  evitar que nunca más haya una Felicita Mandarina abusaba al pie de un cerro, en las escuelas o en los hogares.

Referencias

Buber, M. (2015). ¿Qué es el hombre? México : Fondo de Cultura Económica .

En una tarde denunciaron seis casos de abuso en niños en el Alto Paraná . (13 de Mayo de 2022). Ultima Hora .

Pintos, L. (31 de Mayo de 2022). Abuso sexual: Amenaza ocula en la niñez paraguaya y latinoamericana. La Nación .

1 comentario:

Unknown dijo...

Buen tema es nuestra triste realidad, muy objetivo e interesante punto de vista