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Por: Rodrigo Vega - Puchi
La
semana pasada pobladores del San José de Norte del departamento de
San Pedro se manifestaron luego de que las autoridades destruyeran
unas 100 hectáreas de marihuana. En algunos medios titularon como
“insólita” a la protesta.
Ahora seguramente se preguntarán del por que colocar un título como "hipocresía social", tal vez no sea el término adecuado pero realmente vivimos en una sociedad hipócrita.
En una sociedad dónde el que se rasga las vestiduras por noticias de adulterio es el primero en buscar los servicios de alguna señorita o jóven por la noche.
De
una sociedad machista dónde pegan gritos al cielo cuando una mujer u
hombre decide tener cierta libertad sexual.
En
una sociedad donde se comparte expresiones religiosas a través de
las redes sociales y no la practican, en una sociedad donde se
practica el aborto pero se niegan a una educación sexual en las
escuelas y colegios, donde se cultiva y fuma marihuana pero se niega
o esconden podemos llamarle hipocresía social.
Nuestra marihuana se ha ganado la fama y es tan querida en el exterior como a nivel local que no es una locura pensar en cultivarla y exportarla legalmente (aunque se hace en forma clandestina).
Los campesinos que se animaron a protestar por que sus cultivos de la “hierba maldita” fueron destruidos, demuestran la ausencia del Estado por años, gobiernos han pasado sin dar una solución o dar otras opciones de cultivo. Ni caminos por donde puedan sacar sus productos.
El
abandono es tanto que es aprovechado por los narcotraficantes para
suplir las necesidades de los labriegos, les dan algo para plantar y
los asisten si alguno tiene algún familiar enfermo, o sea cumplen
las funciones de un Estado AUSENTE.
Usamos
tantas plantas medicinales en el día a día, en el mate o terere que
a la marihuana no le vendría mal legalizarla, incluso la usamos de
forma medicinal. Pero existen intereses y los más afectados serían
los organismos del Estado ausente, que prefieren la política de
represión antes que la educación, prevención o tratamiento.
Es
un buen tema para debatir.
Loco,
enamorado y mal educado como siempre.
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