Una marcha "gatopardista"

Por Salvatore Brienza

Hoy se realiza la Marcha por "recuperar los 4.800 millones de guaraníes de recorte presupuestario" de toda la UNE.
Pero lo extraño es que los docentes no quieren recuperar para mejorar la Educación Superior, sino para "una equiparación salarial".
Recuerdo aquel 2015. Uno de nuestros análisis hablaba de que tanta corrupción tendrá sus consecuencias, tarde o temprano.
Nada ha cambiado, es el "gatopardismo" en su máxima esencia.
"Cambiemos todo, para no cambiar nada".
Muchas denuncias se realizaron, algunos me dicen que los estudiantes o el abogado "se equivocó al presentar las denuncias, que no tenía fundamento, que no había pruebas"; pero sigo creyendo que la "corrupción de los Decanos" sigue tan campante como aquellos días de #UNENOSECALLA o #FAFISEDEFIENDE.
Hoy, están renovados. Nuevos directivos, nuevos cargos, nuevos salarios y "viejos vicios".
Y quién se beneficia con esta marcha?
Habrá una nueva biblioteca?
Se comprarán nuevos textos y más modernos?
Habrá pensamiento crítico?
Leerán a Marx, Derrida o Foucault?
O presentarán nuevos textos de la escolástica y el San Agustín, para pensar en el "infierno que mereci y el cielo que perdí"?

Cuál es la visión de una Facultad de Filosofía?
Un profesor de Latín que une dos oraciones y se traga unas cuantas "eses", porque de su boca solo salen "heces"?
A mí, que me encantan los simbolismos, me fijo en el logo del Siprodune.

Son dos manos, una encima de la otra y en medio un ojo. Si, el ojo de la Providencia.(La sabiduría). Pero pinchado por una pluma. (Pluma de pavo)
A los que hicieron el logo les felicito, porque canalizaron el pensamiento de muchos, no digo todos, los Docentes de la UNE.
Unas manos que mendigan la sabiduría del "Ojo que todo lo ve", pero que es ciego a causa de la pluma con el que firman los "nombramientos de amigos, familiares y conocidos".
Nada ha cambiado y nada cambiará.

Los estudiantes siguen tan apáticos y miedosos como siempre. Más aún, cuando los directivos tienen digitado a los directivos  de una Liga Nazi-Fascista Ultra Católica dirigiendo el Centro de Estudiantes.

Eran otros tiempos, cuando se respiraba libertad. Los estudiantes podían ir de la mano y soñar con una Facultad diferente.

Hoy, segregan a los "diferentes y anormales", porque los normales esperan que La Providencia cumpla el "venga a nos tu reino".

Y no saben, que los Docentes creen en una Providencia ciega".

El reino se construye con un "Sígueme de amor, con la verdad y la libertad".