2022, un futuro de oportunidades

Por Salvatore Brienza
Se está yendo el 2021.
Si vamos a evaluar el año que paso, no será fácil para muchas personas.
Hay quienes perdieron familiares y amigos durante esta pandemia que continua.
Recordemos que para la OMS "si un brote epidémico afecta a regiones geográficas extensas (por ejemplo, varios continentes) se cataloga como pandemia".
Eso significa que aún no hemos salido de la situación de Pandemia.
Las vacunas contra el Sars-Cov2 (Covid-19) son todas "mitigadoras del alcance de letalidad" que tenia el virus para las variantes de Wuhan, Delta y otros.
Según los estudios científicos actuales, la variedad Ómicron tiene una letalidad mínima (Salvo que tengas una enfermedad de base), pero es 10 veces más contagiosa que la variedad de Wuhan, lo que implica que "puede hacer colapsar cualquier sistema de salud".
Por otro lado, sigue teniendo las mismas características de la variedad de Wuhan, es decir, uno puede estar infectado y no tener síntoma alguno.
En el caso de Paraguay, nuestro mayor problema es la "incredulidad" y el "ñembotavy" generalizado.
Y eso se demuestra con la poca cantidad de "vacunados" que existe, llegando apenas a un 40% de personas completamente vacunadas en todo el territorio nacional.

La sociedad, en general, ha exigido al gobierno que haya vacunas suficientes para inmunizar a la Población Económicamente Activa (PEA), y de esa manera, asegurar la reapertura de los locales comerciales, eventos deportivos e incluso, la vuelta segura a las instituciones educativas.

El MSPyBS ha estado haciendo campaña a favor de la vacunación de grupos vulnerables, adultos mayores e incluso adolescentes a partir de 12 años. Pero aún así, hay vacunas que están por vencer y que no se han aplicado, porque la población no acude a aplicarse las dosis necesarias para minimizar el riesgo de contagio y mortalidad.
Y en este punto no debemos olvidar que los "antivacunas, antipandemia, antimascarillas y anticualquiercosa", han difundido información falsa, con tal de tener seguidores, y lógicamente, postularse a algún cargo en el 2023. (Si no me creen, anoten esto. Después no digan que no se les avisó).

La campaña de los "Anti", basada en el principio de propaganda falsa instaurado por el jerarca nazi Joseph Goebbels que decía "miente, miente que algo queda", no sólo ha perjudicado a la campaña de "Vacunátepy" sino que han tenido el descaro de decir que hay personas que mueren por haberse aplicado las vacunas. Esto se vio en varias publicaciones, que circulan en redes sociales (su más importante ámbito de difusión) donde incluso familiares de los mencionados salen a desmentir tales hechos.

Es decir, hay una cantidad de personas, incluidos profesionales médicos, dueños de sanatorios y hospitales privados y más de un "fanático religioso" que hacen campaña "antivacuna" por el sólo hecho de "conseguir algún redito político a futuro". O sea, tener una cantidad de seguidores para engatusar y hacerlos votar cuando llegue el momento.

Hasta el 31 de Diciembre del 2020, eran 2.262 muertos por la enfermedad y a partir del 1 de enero se incrementa sustancialmente, llegando a 15.042 muertos el 1 de agosto del 2021.
Esto fue consecuencia de las actividades desarrolladas a fin de año en el 2020 y la reapertura de muchos locales comerciales sin los debidos protocolos, la vuelta a las actividades deportivas, los veraneantes y la semana santa, que desato la verdadera pandemia en nuestro país.
En Abril del 2021 se dispara la cantidad de muertos y en menos de 4 meses se quintuplica.

En todo este tiempo hubo marchas y protestas contra el gobierno de Mario Abdo Benítez, elecciones internas, elecciones municipales, denuncias de robos, malversación de fondos, desvío de dinero a cuentas particulares, etc., que desnudaron todo el sistema de "pillaje y corrupción" que nunca dejó de existir mientras la población se moría.

En definitiva, no podemos evaluar este 2021, sin mencionar al COVID, la CORRUPCION y a aquellos FANATICOS que siguen negando la efectividad de las vacunas.

En los distintos municipios del país, hay nuevas caras, nuevos actores políticos, más informados y menos fanatizados por los colores o las polcas. Como sociedad debemos superar esa visión limitada del  "peichante" y el "vai vai". Hay gente joven, pensando en su futuro político y que pueden, si no se manchan por la corrupción, llegar muy lejos.

Es por ello que el 2022 viene cargado de oportunidades para corregir el rumbo. En diciembre, dentro de un año, se harán las internas simultaneas para elegir nuevas autoridades departamentales (Gobernadores y Concejales) y nacionales (Presidente, Senadores y Diputados).
Y esperamos que en el 2023, se de la mejor de todas las elecciones generales de este periodo de transición democrática, eligiendo a los mejores.

Todo queda en nuestras manos y para poder superar esta crisis, debemos aprender de nuestros errores. 

La vieja clase política y el modelo que ellos representan, de prebendarismo y clientelismo, deben ser desechados.

Muchos amigos, familiares y conocidos partieron en este 2021 y en su memoria, debemos seguir cuidándonos.

Esperemos que el 2022, llegue con mejores oportunidades para todos.